El sector de la manufactura es un pilar esencial de cualquier economía, pero en 2020 promete convertirse en un sector vital para las economías del mundo debido a que la revolución tecnológica, con la misma o mayor fuerza que la revolución industrial generó para dar nacimiento a este tipo de sectores, hoy se levanta como la transformación absoluta de la dinámica de ensamblaje y creación de productos y bienes a mano en las grandes líneas de producción global.
«El sector industrial va a evolucionar hacia modelos ‘as a service’ para adaptarse a las necesidades de los consumidores finales, reducir costes y mejorar su eficiencia”, según Ramón Martil, director comercial de sector privado de la firma T-Systems, filial de servicios digitales del grupo alemán de telecomunicaciones Deutsche Telekom.
Las palabras del experto se traducen en que la tecnología que se instaure en el sector podrá, no solo facilitar el trabajo a los operadores, sino también crear un clima laboral que permita distribuir eficientemente las cargas de trabajo entre todo el personal y alivianar las presiones asociadas con el ensamblaje rápido de las líneas de producción.
«Es crucial para la industria adaptarse a las demandas de un nuevo consumidor que quiere productos de calidad, fabricados de forma responsable, personalizados e integrados en un ‘todo digital’, y todo esto cada vez entregado de forma más cómoda y en menos tiempo. Toda la cadena de producción se verá afectada por esta nueva realidad en la próxima década”, añade Martil.
Se trata de entender que, ahora más que nunca, la gran apuesta de las empresas debe estar dirigida hacia la producción con elementos tecnológicos en un 90%. Para lograrlo, las cinco tendencias que dominarán el sector a lo largo de este año son las siguientes:
- Del IoT al AIoT
Durante la última década se ha hablado de los beneficios del IoT: proporciona información sobre los procesos y los costes de producción, así como sobre la cadena de suministro (calidad de las piezas y los productos producidos, de dónde proceden o cómo se compraron o crearon los componentes, etc.). Consiste en una base de datos que contiene información específica y detallada sobre la composición y el uso correcto de cada insumo en la línea de ensamblaje.
- IA y machine learning (ML): Análisis predictivos para mejorar la eficiencia y rendimiento
La aplicación de la IA y el ML vendrá ligado a la estandarización de los sistemas IoT. Los análisis predictivos van a permitir tener un mejor control y monitorización de las máquinas que participan en la cadena de producción, evitando averías inoportunas y paradas en la producción, ahorrando una importante cantidad de tiempo, dinero y recursos. Por lo tanto, implica un inventario de sistemas de inteligencia artificial diseñada para auditar y supervisar el funcionamiento óptimo de cada aparato de montaje, es decir, se podrá tener un control casi omnipresente sobre todas las líneas de producción.
- Seguridad avanzada para entornos industriales
Diversos estudios independientes sitúan en torno a 44.000 millones la cifra de dispositivos IoT (Internet of Things / Internet de las Cosas) conectados a la red en 2023, y la consultora IDC calcula que el mercado de IoT alcanzará un valor de 1,1 billones de dólares en 4 años. Este sistema permite vincular el funcionamiento y respuesta automatizada de los aparatos y máquinas de ensamblaje con una red de computadoras y teléfonos que los operarán en una especie de control remoto vía Wi-Fi.
- 5G: Impulso para la transmisión de datos
Unida también a las dos anteriores, el 5G será un factor clave para la estandarización del IoT y la transformación real de la industria. Entre los beneficios de este nuevo tipo de redes, están conexiones más rápidas y estables, con mayor rango de cobertura. Entonces, la gran ventaja en este punto es que los datos se enviarán a una velocidad cercana a 0,5 terabytes por segundo.
- Realidad aumentada
La realidad aumentada encontrará una aplicación destacada en la prueba de nuevas configuraciones de la cadena de producción. Llega al mercado con la solución Virtual Commissioning, que permite acortar y agilizar la fase de puesta en marcha de nuevas líneas de montaje o de fábricas completas.