Nube pública: una herramienta de fácil acceso a datos para las redes internas de la empresa

La organización interna de los datos de una empresa es una de las tareas esenciales que todo el equipo de operadores y la junta directiva deben tomar en cuenta a la hora de planificar una estrategia de optimización o de lanzamiento de nuevos servicios.

 

Y es que se trata de un conjunto de recursos virtuales desarrollados a partir del hardware que pertenece a una empresa externa encargada también de gestionarlo. Al ser pública, no implica que cualquier desconocido o agente externo de otra empresa tendrá acceso a tus datos, sino que en realidad todos los miembros del equipo interno podrán acceder a ellos con claves y parámetros de seguridad digital especiales.

 

La nube se asigna y se pone a disposición de varios clientes a través de una infraestructura de autoservicio de forma automática. Por lo tanto, tiene opciones que facilitan la automatización de la interfaz multitarea para gestionar los datos de manera eficaz dentro de la plataforma de almacenamiento en la nube.

 

Es una forma sencilla de escalar horizontalmente las cargas de trabajo que experimentan fluctuaciones inesperadas de las demandas. Es decir, mientras aumenta la demanda del mercado, más se incrementará el rendimiento y el valor agregado del equipo de trabajo con base en el apoyo estratégico de la nube pública de datos.

 

Por lo general, las nubes públicas actuales no se implementan como una solución de infraestructura independiente, sino como parte de una mezcla heterogénea de entornos que genera más seguridad y rendimiento, menor costo y mayor disponibilidad de infraestructura, servicios y aplicaciones. Se trata de un amplio esquema de organización y jerarquización estratégica de los datos enfocado en la optimización de los flujos de trabajo.

 

En Kenos ponemos a tu disposición una variada selección de nubes públicas y también te explicamos cómo funciona este versátil sistema de gestión de datos.

 

Las nubes públicas se configuran de la misma forma que las privadas. Ambas usan una serie de tecnologías para virtualizar los recursos en grupos compartidos, agregar un sistema de control administrativo a todo el entorno y crear funciones de autoservicio automatizadas. Cuentan con un mecanismo de monitoreo y seguimiento al flujo de datos en tiempo real con cada entrada, salida y transferencia de información ejecutada.

 

En conjunto, dichas tecnologías crean una nube que será privada, si proviene de sistemas reservados para las personas que los utilizan y gestionados por ellas; o pública, si se ofrece como un recurso compartido a varios usuarios. Facilita la interrelación profesional en el cumplimiento de los procesos de cada departamento o área de la empresa.

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